Dónde dormir en Yogyakarta

Si estas buscando dónde dormir en Yogyakarta, deja de buscar. El sitio del que te voy a hablar aquí ni es un hotel con grandes lujos ni un hostel de mala muerte. Es un alojamiento que lo tiene todo (bueno, igual le falta una piscina, por ponerle una pega) para hacer que te sientas a gusto. Se trata del Snooze, un pequeño hostel con una ubicación ideal, trato inmejorable y buen precio. ¡Sigue leyendo!

Dónde dormir en Yogyakarta: Snooze

Snooze es más bien una casa de huéspedes. Te sientes tan como en casa que llamarlo hostel me resulta frío. Y es que realmente es una casa con tres habitaciones dobles y dos habitaciones con literas para cuatro y dos personas respectivamente. Además cuenta con cuatro zonas comunes en las que puedes estar muy a gusto: una zona con cafetería (si te gusta el café, ¡tienes que probarlo!), una sala más chill out con cojines en el suelo, una zona con una mesa para comer o trabajar y un patio con varias mesas.

En Snooze también puedes cocinar, rellenar tu botella de agua reutilizable gratis y cuentan con dos baños y dos duchas. Con agua fría, eso sí. Pero sinceramente, ¿quién quiere bañarse con agua caliente cuando hay 30 grados en la calle? Además, al mediodía da tanto el sol que el agua sale caliente de forma natural.

Otro plus que valoro mucho es que no utilizan ningún sistema artificial de climatización. No hay aire acondicionado ni calefacción. Y nos alojamos con ellos 10 días y no nos hizo falta en ningún momento. Tienen un sistema de ventilación natural y ventiladores.

Nosotros nos quedamos en una de las habitaciones privadas. Son amplias, tienes espacio para dejar tus cosas y la cama es comodísima.

También destacaría la limpieza: la casa la limpian a diario y a nosotros nos hicieron la habitación cuando se lo solicitamos. Nos quedamos tantos días que no necesitábamos servicio de limpieza cada día, obviamente.

Ubicación del Snooze en Yogyakarta

Para mi la ubicación es inmejorable y muy privilegiada. Se encuentra dentro de la zona del Palacio del Sultán, un recinto que comprende el Palacio y el área de casas que lo rodea. Estás a cinco minutos del Kratón y del Castillo del Agua y a otros cinco minutos de la calle Malioboro, una de las principales arterias de Yogyakarta.

Como nosotros nos alojamos durante 10 días, decidimos hacer uso de la cocina del Snooze. Hicimos la compra en un supermercado que hay a unos 15 minutos caminando desde la casa.

La gestión del Snooze

Normalmente, cuando hago reviews de hoteles o hostels en los que nos alojamos, suelo dedicar una frase al personal. Pero en el caso del Snooze creo que se merecen un párrafo a parte. Y no se debe solo a que pasamos 10 días con ellos, que también.

El Snooze lo gestionan Jessica y Issei, francesa e indonesio respectivamente. Son pareja y tras viajar por el mundo decidieron abrir un alojamiento en Yogyakarta en el que aplicar todo lo que a ellos les gusta de los alojamientos en los que se han quedado.

Cuando te alojes con ellos comprobarás de lo que hablo. Te recibirán con una sonrisa, te darán consejos, se preocuparán porque estés a gusto. Te harán sentir en casa. Y eso, más allá de que la cama sea cómoda o no, es algo que yo valoro mucho. Me gusta llegar a un alojamiento y sentir que para la dueña o el recepcionista no soy una huésped más.

Issei ha vivido durante muchos años en Yogyakarta, por lo que te dará los mejores consejos para disfrutar la ciudad y los lugares imprescindibles que debes visitar.

En el Snooze trabaja más gente, claro. De hecho, la casa nunca está vacía y siempre tienes la oportunidad de hablar con gente local. Jóvenes que les echan una mano con el negocio, que se encargan de la cafetería, que decoran las paredes de la casa con su arte, etc.

Los desayunos del Snooze

Otra cosa que merece una mención a parte de este alojamiento en Yogyakarta son los desayunos. Si a estas alturas estabas todavía dudando sobre si reservar en este alojamiento, creo que voy a acabar de convencerte.

En el precio incluyen un desayuno a escoger entre tres opciones: indonesia, vegetariana o francesa/europea. Las opciones varían cada día y los desayunos los preparan entre Jessica y parte del equipo. Yo fui fiel a la opción francesa cada uno de los 10 días que pasé en el Snooze porque Jessica sabe muy bien lo que hace en cuanto a crepes, gofres y french toast se refiere.

Me encantó saber que se levantan a diario para ir a comprar los ingredientes al mercado y que intentan reducir los residuos de un solo uso comprando a granel.

¿Todavía tienes dudas sobre dónde dormir en Yogyakarta?

Extras

Por si eso fuera poco, quería destacar un par de cosas más sobre este alojamiento en Yogyakarta:

• Cuentan con fibra óptica. O sea Internet que va a la velocidad del rayo.
• En la cafetería tienen pajitas de acero inoxidable. Y puede que yo haya tenido algo que ver en eso 😀
• Disponen de servicios variados: lavandería (no lo hacen ellos pero se lo llevan a una empresa), tours para ir a Borobudur o Prambanan, alquiler de motos, etc.

Ya ves, para mi no hay mejor opción donde dormir en Yogyakarta. Estuvimos muy a gusto y no nos cansaremos nunca de recomendar este alojamiento. Si tienes cualquier duda, puedes dejarnos un comentario o escribirnos un email.

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